Una vida dedicada a la investigación y la docencia en Genética. Prof. Emérita Ekaterina Scvortzoff

La Prof. Ekaterina Scvortzoff (Katia) recibe el título de Licenciada en Biología en el año 1964 de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de la República. En ese momento no existía en Uruguay programa de posgrado y postula para realizar una maestría en el exterior con el Dr. Joseph Murray, de la Universidad de Virginia Estados Unidos con quien mantuvo un vínculo estrecho actualizándole periódicamente de los avances de la Genética del Uruguay y de sus alumnos.

Luego de finalizado su posgrado prosigue su carrera académica como docente e investigadora del Departamento de Genética de la Facultad de Humanidades y Ciencias. Katia demuestra su independencia científica desarrollando una línea de investigación original en citogenética y evolución de ortópteros y coleópteros. Accede por méritos al Régimen de Dedicación Total, situación que mantuvo hasta su retiro. Katia logró en toda su trayectoria académica mantener un laboratorio de investigación activo de reconocida trayectoria que formó decenas de estudiantes, muchas veces sosteniéndolo con sus propios fondos.
Siempre estuvo abierta a escuchar y apoyar nuevas iniciativas o líneas de investigación, aunque fuera imposible desarrollarlas por falta de financiamiento, y transmitir que sí era posible. En ese ámbito, no solamente consolidó de manera destacada su campo de investigación, sino que propició la generación de nuevas líneas de trabajo que serían a posteriori desarrolladas con singular éxito por parte de sus estudiantes.       Al crearse el PEDECIBA participa desde los inicios como investigadora Grado 5 en el desarrollo de la subárea Genética. Para los estudiantes del Programa, es conocida su labor docente, participando activamente en cursos como responsable o participante. Integra las Comisiones de Ingreso y Seguimiento de los estudiantes, así como de tribunales de evaluación. En 2013 la Subárea Genética solicita su reconocimiento como Profesora Emérita.

Todos recordamos a Katia porque nos dejó, además de la formación en Genética, otros valores que pocos docentes se detienen en trasmitir, como la disciplina, el rigor científico, que exigía revisar si había algo nuevo; su generosidad en compartirlos transcendió más allá de su retiro. Con sus alumnos más cercanos mantenía contactos periódicos, enviándonos bibliografía para ayudarnos y recordarnos que era necesario e importante estar siempre actualizados. Más allá de trasmitirnos los conocimientos de la disciplina en Genética evolutiva dejó la huella en sus alumnos en la formación científica que fue transmitida desde el primer contacto hasta el fin de su vida.

Texto: Dra. Susana González